Pasamos 10 minutos en esa posición hasta que me tranquilice.
-Lo siento Dev,debió ser duro.-Dije soltándome.
-Sí,bueno a veces es bueno hablar de esto para desahogarte.-Dije secándome las lagrimas.
-¿Quieres un vaso de agua o algo?
-Ah,ahora si que me traes lo que quiero,no?.-Dije riendo.
Él río ante mi comentario.Adoraba su risa.
-¿Que tal si comemos algo?
-Claro,podemos hacer algo rápido.
Salimos de la habitación y nos fuimos hacía la cocina.
Decidimos hacer una pizza entre los dos.Sacamos todos los ingredientes y nos pusimos manos a la obra.
-¡Ala animal!¡Los trozos más pequeños!.-Grite al ver los trozos de bacon que Harry estaba poniendo en la pizza.
-Que no te vas a atragantar,eh?
-Anda, ralla el queso que yo me encargo de esto.
Estaba tan tranquila cortando esos enormes pedazos cuando Harry me tiró harina por todo el pelo.
-¡¡¡Harry,yo te mato!!!.-Dije mientras él reía.
Cogí un puñado de harina y se lo tiré.
-¡Eh!¡Esta me la pagas enana!
-¡Eso si puedes atraparme!.-Dije mientras salía corriendo de la cocina.
Corríamos por la casa como si fuéramos niños.Llegó un momento en que Harry me tenía acorralada y no tenía escapatoria.Por desgracia era más alto que yo así que logró cogerme.
Me empezó a hacer cosquillas y yo me reía como si no hubiera mañana.
-Harry,pa-ra por fa-vor.-Dije riendo sin parar.
-No hasta que te disculpes.-Decía mientras reía.
-No,nunca.
-Tengo una idea...
-Harry,me das miedo...
-Pararé ,si me cantas algo.-Dijo con una gran sonrisa.
-Va-le,lo que tú quieras.
-Si me ibas a dar esa repuesta,te abría dicho otra cosa.
-¡Harry! .-Dije mientras me deshacía de su agarre.
-Venga,no te enfades,canta algo,por favor.-Dijo con cara de pena.
-Tu cara de cachorrito no funciona.
-Por favor,por favor,vamos y limpiaré el estropicio de la cocina.-Dijo de rodillas.
-Vale me has convencido con tu última oferta.
-Mala persona.-Dijo levantándose.
-Pero me quieres.-Dije caminando hacía el piano.
-No sabes cuanto.-Dijo con una sonrisa.
Me senté frente al piano y empecé a tocar.
-¿Has pensado alguna vez en dedicarte a esto?.-Me preguntó Harry cuando acabé de cantar.
-Pues la verdad es que sí,pero no sé...
-¿No sé qué?.-Preguntó extrañado.
-Me da vergüenza... .-Dije dirigiendo mi mirada la suelo.
-Eh escúchame.-Dijo mientras me cogía la barbilla.Eres perfecta tal y como eres y no debería importarte lo que piense la gente de ti.
Me sentí absorbida por sus ojos,sus labios,sus palabras.Era como si solo existiéramos en el mundo.
Justo cuando él iba a acabar con la distancia que separaba nuestros labios sonó el timbre.
"Mierda" salió de su boca mientras yo me acercaba a la puerta para hablar por el telefonillo.
-¿Quién es?.-Dije con el teléfono en la oreja.
-Cerecita,soy yo.-Dije una voz detrás del teléfono.
Me resultaba muy familiar hasta que al final caí.Nadie más que ella me llamaba cerecita. Era Beatrice.
-Be... sube anda.-Dije sin pensar.
En dos minutos ya estaba en la puerta.No sé si era yo o esta chica cada día era más pelirroja.
-Hola,cerecita.-Dijo con una gran sonrisa.
-Hola,melocotón ¿que haces aquí?.-Dije con una sonrisa nerviosa.
-¿Que pasa que no puedo venir a verte?Es que tienes a Niall por ahí escondido eh pillina.-Dijo asomándose un poco a la puerta.
En cuanto vio a Harry la cara le cambio en un segundo.
-Oh lo siento ¿interrumpo algo?.-Dijo mirándome preocupada.
-No tranquila, yo ya me iba.-Dijo Harry detrás de mi.
Yo me quedé quieta no sabía que excusa ponerle a Beatrice,porque seguro que iba a preguntar y a mi eso de mentirle a una de mis mejores amigas se me daba mal.Siempre me descubría.
-Adiós,luego hablamos.-Dijo mientras me daba y un beso en la mejilla y luego desaparecía por la puerta.
-No ha pasado nada.-Dije deprisa antes de que me preguntara.
-A mi no me engañas.-Dijo sentándose en el sofá y haciéndome un gesto para que me sentara a su lado.
-Be... que no ha pasado nada.-Dije nerviosa.
-Dev,te conozco,vamos cuenta.
-Esta bien... .-Dije suspirando.
Le conté todo lo que sentía,todo lo que había pasado con Harry y la terrible decisión que tendría que tomar.
-Con que de un triangulo amoroso hablamos... .-Dijo Beatrice.
-Pues sí y tengo ni idea de lo que hacer.-Dije dejándome caer sobre el sofá.
-Lo primero.-Dijo mirándome seria.-Que no se entere la prensa.Segundo esto te va a costar mucho.
-Oh en serio Be no sabía ninguna de esas dos cosas.
-Reconoce lo,echabas de menos mi lógica.-Dijo riendo.
-Sí una cosa,tus consejos siempre son geniales y me sirven de mucho.
-Oye tu has decidido contármelo sabes que yo en esto del amor soy muy mala.
-Uyy.. es verdad ¿que tal con Derek?
-Pues... ya sabes,vamos a clase juntos y quedamos algunas veces para tomar algo,nada más.
-¡¿Y ya esta?! Llevas desde que te mudaste a Massachusetts y empezaste el curso de orientación en Harvard sin parar de hablar de él.
-No es mi culpa que su residencia este al lado de la mía y que cada vez que me vea me dedique esa preciosa sonrisa suya.
Yo reí cuando dijo eso,se le veía que estaba empezando a enamorarse de ese chico y sabiendo como es Beatrice me iba a ser divertido que nos contará a Jazz y a mi lo que le pasaba con él.
-Sabes Be eres increíble y si no sabe ver eso,es que es ciego.
-Awww,mi pequeña cerecita,que ganas tengo de tenerte en Estados Unidos el año que viene.Y verte los fines de semana.
-No lo tengas tan claro... .-Dije apenada.
-Vamos,seguro que entras en Julliard,cantas genial y tienes un montón de nivel en música.
-Pero ¿y si me cogen?
-Pues tendrás que mudarte a Nueva York y nos veremos los fines de semana porque iré a verte.
-Me tendré que separar de Jazz y de Niall...
-Y de Harry...
Miré a Beatrice con una mirada asesina,lo que menos necesitaba es que me recordaran que estaba en una difícil situación.
-¿Sabes lo que echo de menos?Esas fiestas de pijama en mi casa,hablar hasta las tantas de estupideces,de comer sin para pizza y reír hasta quedarnos sin respiración.
-Jo,yo también,tengo una idea.
Beatrice me miró extrañada a lo que yo le respondí con una gran sonrisa.
-¡¡Mañana día de chicas!!.-Grité a los cuatro vientos.
